SITUACIONES, ESCENARIOS Y PERSONAS
Planeación:
En esta sección, explicaremos en detalle cuál fue nuestro proceso para identificar a nuestros usuarios y diseñar nuestras personas de manera precisa y profunda. Para lograrlo, seguimos una metodología que nos permitió comprender mejor sus necesidades, comportamientos y expectativas. Todo este proceso lo llevamos a cabo en Canva, ya que, además de ser una plataforma intuitiva y fácil de usar, nos brindó la posibilidad de colaborar de manera eficiente como equipo. Gracias a sus herramientas de edición y trabajo compartido, pudimos estructurar nuestras ideas, visualizar la información de forma clara y asegurarnos de que todos los miembros del equipo participaran activamente en la construcción de nuestras personas.
Evidencias:
Paso 1:
Para iniciar nuestro proyecto, llevamos a cabo una junta en la que definimos a nuestro usuario principal: las maestras de la materia de Cívica y Ética. Decidimos enfocarnos en ellas porque nuestro producto está diseñado para facilitar la enseñanza de temas complejos, incómodos, pero sumamente necesarios dentro del aula. En específico, buscamos apoyar la educación de estudiantes de entre 10 y 14 años, quienes se encuentran en una etapa crucial de su desarrollo, donde comienzan a experimentar sus primeros intereses afectivos y de pareja. Consideramos que este es el momento ideal para abordar la temática de la violencia en las relaciones, ya que permite generar conciencia desde una edad temprana. Nuestro objetivo es proporcionar herramientas que ayuden a los niños y niñas a reflexionar y desarrollar relaciones sanas desde el inicio de su vida afectiva.
Paso 2:
Para desarrollar nuestros user personas, creamos dos perfiles clave: uno centrado en las maestras y otro en los alumnos.
Para el perfil de las maestras, diseñamos a Dulce Miel, una profesora de secundaria que busca comunicar y enseñar de manera dinámica, utilizando herramientas visualmente atractivas que capten la atención de sus estudiantes. Sin embargo, enfrenta la frustración de que las opciones disponibles para abordar estos temas en el aula son limitadas, lo que dificulta su labor docente y reduce el impacto de su enseñanza.
Por otro lado, en el perfil de los alumnos, creamos a Valeria, una niña de 14 años que necesita aprender sobre la violencia contra la mujer y su impacto en la sociedad. Valeria siente frustración cuando los adultos no la toman en serio y se conforman con situaciones que, para ella, son claramente incorrectas. A pesar de su deseo de expresar sus opiniones y señalar injusticias, a menudo es minimizada o ignorada, lo que refuerza su sentimiento de impotencia frente a estos problemas.
Estos perfiles nos ayudaron a comprender mejor las necesidades y desafíos de nuestros usuarios, permitiéndonos diseñar un producto más efectivo y relevante para ambos.
Paso 3:
Para profundizar en la comprensión de nuestro usuario y abordar de manera más efectiva el reto de diseño, recurrimos a una serie de métodos de diseño. Uno de los primeros que aplicamos fue el método de las Ws, el cual nos permitió desglosar el problema en distintos aspectos clave.
Este método consiste en dividir la información en cuatro columnas tituladas: "Who" (Quién), "What" (Qué), "Where/When" (Dónde/Cuándo) y "Why" (Por qué). A través de este esquema, identificamos quién está involucrado en la situación, qué está ocurriendo, en qué contexto y momento sucede, y cuál es la razón detrás del problema. Este ejercicio no solo nos ayudó a organizar la información de manera clara, sino que también facilitó la creación de una frase que sintetizara todos estos elementos en una idea central y concisa.
En nuestro caso, el esquema quedó de la siguiente manera:
Para terminar la frase que junta todo lo encontrado en este esquema, quedo de la siguiente manera:
Paso 4:
Para asegurarnos al 100% de que el problema principal de nuestras usuarias era realmente el que habíamos identificado, aplicamos el método de los cinco porqués. Este método consiste en formular una pregunta inicial que comience con "¿Por qué?", responderla y, a partir de esa respuesta, generar una nueva pregunta que también inicie con "¿Por qué?". Este proceso se repite cinco veces, lo que permite profundizar en la causa raíz del problema en lugar de quedarse en la superficie.
El ejercicio concluye con la formulación de un POV (Point of View), una frase que resume la problemática desde un enfoque más profundo y detallado, basándose en las respuestas obtenidas a lo largo del análisis.
En nuestro caso, el esquema de los cinco porqués quedó de la siguiente manera:
SITUACIONES
Situación 1
La Maestra Miel está preparando su clase de Formación Cívica y Ética y ve en el temario que debe abordar el tema de la violencia de género en la sociedad. Piensa en cómo puede tratar el tema de una manera fácil de entender y adecuada para sus alumnos.
Revisando el libro viejo de la escuela, nota que la información proporcionada no está actualizada y es demasiado técnica. Frustrada y agobiada por no saber cómo llevar su clase con información actual y con ideas más fáciles de digerir para los niños, no quiere dar una clase llena de definiciones abstractas que, al final, sus alumnos van a olvidar y no tomarán en serio. Quiere tocar el tema de la violencia de género con importancia para que puedan estar bien informados, sepan identificarla y prevenirla en sus vidas. Pero no sabe cómo hacerlo sin que la clase sea tediosa, sin que los alumnos se lo tomen a la ligera o sin que tengan dificultades para comprenderlo a su edad (10-13 años).
En busca de una herramienta, explora en internet y se encuentra con puros videos demasiado fuertes para los alumnos, textos muy largos y difíciles de entender, información muy vieja o errónea, y actividades que no son prácticas ni funcionales para sus grupos.
Al día siguiente, intenta una clase de prueba para ver cómo reaccionan sus alumnos respecto al tema. Empieza por hacer una pregunta:
......¿Alguien sabe qué es la violencia psicológica?
La mayoría de sus alumnos se quedan callados e incómodos, otros solo murmuran entre ellos pero no hablan excepto por uno de sus alumnos, que levanta la mano para responder:
......Es cuando alguien te dice algo feo, como una grosería, ¿no?
La Maestra Miel se da cuenta de que sus alumnos no tienen una idea clara sobre el tema de la violencia. Intenta abordarlo más a fondo con la misma dinámica de hacer preguntas generales, pero al final de la clase siente que su estrategia no tuvo impacto en los niños. Sabe que su enseñanza no logró conectar con ellos y teme que muchos sigan normalizando la violencia sin darse cuenta.
Situación 2
Valeria, una estudiante de 6to de primaria en una escuela pública de Puebla, ha comenzado a notar que muchas niñas y mujeres a su alrededor enfrentan diferentes tipos de violencia, pero no sabe cómo nombrarlas o entenderlas completamente. Ha escuchado entre las madres hablar sobre situación de abuso con sus parejas. Sin embargo, nadie en la escuela le ha explicado qué es la violencia o cómo reconocerla.
En clase de cívica y ética, la maestra menciona superficialmente la violencia contra las mujeres y con palabras muy abstractas que a veces ni ella ni sus compañeros de clase entienden. Cuando Valeria intenta hacer preguntas o dar su opinión, la maestra responde con comentarios como "eso es complicado de entender para niños de tu edad" o "ya lo entenderás cuando seas mayor". Valeria se queda con muchas dudas y una sensación de frustración porque siente que estos temas son importantes, pero no tiene acceso a la información necesaria para comprenderlos.
Un día, Valeria escucha que una de sus compañeras fue acosada por un compañero en el recreo. La amiga le cuenta que el niño le hizo comentarios incómodos y que, cuando le pidió que se detuviera, él se rio y le dijo que estaba jugando. Valeria quiere ayudar, pero no sabe cómo hacerlo.
Al pasar los días, Valeria empieza a notar que estas situaciones se repiten. Se siente confundida y frustrada porque no sabe qué es violencia psicológica o violencia económica, ni cómo podría ayudar a su amiga o protegerse a sí misma. Siente que este tipo de conductas no están bien pero ve que su está las normaliza, pero no tiene las herramientas para comprenderlas ni enfrentarlas. La falta de información y apoyo hace que Valeria empiece a creer que la violencia es algo inevitable y que no vale la pena tratar de cambiar las cosas porque "así son las cosas".
Valeria podría crecer normalizando la violencia y perdiendo la confianza para hablar sobre estos temas. Podría dejar de intentar ayudar a otras niñas o incluso aceptar situaciones de violencia en su propia vida, sintiéndose indefensa y sin control sobre su realidad.
ESCENARIOS
Escenario 1
La Maestra Miel está en su aula con 25 alumnos de 6to de primaria. El tema del día de hoy es: enseñar sobre la violencia de género, un tema delicado y fundamental. Al revisar el temario, se da cuenta de que debe cubrir no solo la violencia física, sino también la violencia psicológica, sexual, obstétrica y económica, pero teme que los alumnos no comprendan la información de forma adecuada.
Decide usar el libro digital de cívica y ética, una herramienta moderna diseñada para enseñar estos temas a niños de 10 a 13 años de manera accesible y divertida. Con el libro, los alumnos pueden interactuar con actividades dinámicas y ejemplos cercanos a su realidad. La Maestra Miel siente que esta es la oportunidad perfecta para enseñarles de forma profunda sin abrumarlos con definiciones complejas.
Al iniciar la clase, proyecta el libro digital en la pantalla de la pizarra. En la primera actividad, los estudiantes deben identificar distintos tipos de violencia en situaciones cotidianas que aparecen como viñetas interactivas. La Maestra Miel observa con atención cómo los estudiantes participan activamente, levantando la mano sobre las diferentes formas de violencia. Valeria, una de sus estudiantes más participativas. La Maestra Miel se siente orgullosa y agradecida de que, con el libro digital los estudiantes no solo estén aprendiendo, sino también comprendiendo el impacto de estas violencias en sus vidas.
Después de la dinámica, la Maestra Miel les pide a los alumnos que discutan en pequeños grupos situaciones en las que puedan haber visto formas de violencia sin ser conscientes de ellas. A medida que los grupos trabajan, la Maestra Miel camina por el aula, observando cómo los alumnos se sienten cómodos hablando del tema y compartiendo ideas que antes ni siquiera habrían considerado.
Cuando la clase termina, la Maestra Miel siente una mezcla de satisfacción y alivio. El tema que pensaba sería difícil de abordar se ha convertido en una conversación abierta y reflexiva. Ve cómo los estudiantes están realmente aprendiendo, comprendiendo la importancia de identificar la violencia en todas sus formas, y lo mejor, se sienten empoderados para actuar si alguna vez se encuentran en una situación similar.
La Maestra Miel sabe que este tipo de clases pueden cambiar vidas, y ahora, con el libro digital, tiene la herramienta adecuada para continuar enseñando a sus alumnos temas esenciales de manera accesible y memorable.
Sus alumnos no solo han aprendido sobre violencia, sino que han comenzado a crear una cultura de respeto, igualdad y prevención desde una edad temprana.
Escenario 2
Valeria, de 12 años, está en clase de Formación Cívica y Ética. La Maestra Miel ha decidido realizar una actividad con un libro digital de cívica y ética para abordar el tema de la violencia de género de manera dinámica y comprensible.
La clase inicia con una actividad grupal del libro, donde se presentan situaciones cotidianas para analizar los diferentes tipos de violencia, como la psicológica, obstétrica y económica.
En la primera dinámica, la Maestra Miel proyecta en la pantalla una de las situaciones incluidas en el libro digital:
"Ana quiere contarle algo a su mamá: su papá le revisa el celular y le dice que 'no está bien' que una niña salga sola."
La Maestra Miel pregunta:
—¿Qué tipo de violencia creen que es esta situación?
Valeria piensa por un momento, levanta la mano y responde con seguridad:
—Creo que es violencia psicológica, porque el papá de Ana la quiere controlar y hacerla sentir mal por algo que en realidad no está mal.
La maestra sonríe y le dice que su respuesta es correcta. Luego, otros compañeros comienzan a participar, apoyándose en lo que leyeron y aprendieron anteriormente.
Al final de la clase, la Maestra Miel siente que esta dinámica ayudó a sus alumnos a entender mejor la violencia de género. Valeria, en particular, ahora sabe que el control y la manipulación también son formas de violencia y comprende la importancia de hablar del tema y buscar apoyo si alguna vez enfrenta una situación similar.